Los datos presentados a continuación son fruto de un monitoreo exhaustivo desarrollado los 365 días del año por nuestro Colectivo en el marco de nuestro Observatorio de Derechos en Frontera. Comunidades migrantes, servicios de rescate, redes de familiares y defensores de Derechos Humanos en terreno recogemos, contrastamos y sistematizamos una información necesaria.
Este informe aporta los datos de víctimas de la necropolítica aplicada en el control fronterizo durante el año 2022 en la Frontera Occidental EuroAfricana. Las cifras han sido confirmadas por el Colectivo Ca-minando Fronteras en nuestro Observatorio de Derechos Humanos. Registran las víctimas de las rutas marítimas del Mediterráneo Occidental en las rutas del Estrecho, Alborán y Argelia y del Atlántico en la ruta canaria; así como las terrestres de las vallas de Ceuta y Melilla.
Este trabajo de monitoreo desarrollado durante 2022 da cuenta de la tendencia cada vez más mortífera de las rutas migratorias en los últimos años, como ya señalamos recientemente en el informe Víctimas de la necrofrontera 2018-2022: por la memoria y la justicia. Solo en 2022, nuestro colectivo ha contrastado el fallecimiento de 2.390 personas en su trayecto migratorio hacia Europa.
Vuelve a destacar la ruta entre las costas occidentales norafricanas y las Islas Canarias como la más mortífera en este periodo, con 1.784 víctimas. En el informe señalamos una extensa lista de consecuencias de las políticas migratorias que dificultan, obstaculizan o directamente omiten poner en marcha mecanismos de rescate de las vidas de las personas migrantes.
En 2022 fuimos testigos del caso flagrante de violación transnacional de derechos en la frontera terrestre entre Melilla y Nador, donde el 24 de junio perdieron la vida 40 personas en un suceso que implicó la utilización de medios terribles de disuasión por parte de las fuerzas policiales españolas y marroquís, entre ellos, balas de fuego.
Ponemos el acento en la invisibilización de la ruta migratoria argelina, entre las costas del norte de Argelia y el Levante peninsular y las Islas Baleares. La larga distancia de la ruta, unida a la falta de alertas por parte de familiares y allegados, así como a la omisión institucional del deber de socorro hacen que no podamos reconstruir las tragedias en esta región ni dar cuenta de las víctimas totales de esta ruta.
En este informe reiteramos que la mayoría de los cuerpos de las víctimas en las rutas marítimas (el 91,42%) desaparecen en el mar sin dejar rastro. En esta situación, las familias y comunidades se enfrentan un duelo ambiguo con múltiples implicaciones legales y psicológicas.
Descarga aquí el informe Monitoreo del Derecho a la Vida – Año 2022 en español y al final de la página en inglés, francés y catalán.
¿Estás buscando a un familiar o conocido desaparecido en una ruta migratoria? Si es tu caso, contacta con nosotras aquí.